viernes, 14 de junio de 2013

LA CONSTANCIA DEBE LLEVAR A FELIZ TERMINO LA OBRA


NO TE LAMENTES DEL MUNDO. EL MUNDO NO ES MALO. SON LOS HOMBRES LOS QUE AÚN NO HAN LOGRADO SER BUENOS.
Hermanos míos, considérense muy dichosos cuando tengan que enfrentarse con diversas *pruebas,  pues ya saben que la prueba de su fe produce constancia.  Y la constancia debe llevar a feliz término la obra, para que sean *perfectos e íntegros, sin que les falte nada.  Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie.  Pero que pida con fe, sin dudar, porque quien duda es como las olas del mar, agitadas y llevadas de un lado a otro por el viento. Santiago 1: 1 al  6
 
¡EL CIELO ESTA EN TU INTERIOR! APRENDE A VIVIR EN ESTE PARAISO.

Siempre que nos ganemos la pregunta "quien te crees que eres", si somos motivados por el amor y una preocupación por los demás y un deseo para hacer la voluntad de Dios, nosotros somos como Jesús: Nuestra autoridad viene del Padre. ¡Pero ten cuidado! Así como Jesús indicó, si nos glorificamos a nosotros mismos defendiéndonos, tal gloria fracasa. El que nos glorifica es el Pa

¡Y tú!, Quizás parezca que tú no eres una gran persona, pero contienes a Jesús. ¡Tú contienes una grandeza más allá de la imaginada! Esta grandeza no habita sólo en ti; sale de ti en cada cosa buena que haces. Esto es una vida de fe.
Ser seguidores de Jesús, significa que aprendemos a imitarlo. Al hacer el bien, el mal es derrotado. En esta bondad, la grandeza de Jesús se extiende fuera de nosotros. En esta bondad, hay causa para una gran alegria.


 




¡ Regocijate ! Éste es nuestro canto. Esto es lo que debemos proclamar siempre como gente de fe.

No te enfoques en lo que destruye tu alegría, puesto que nada puede destruir ni impedir la venida del Señor. La ausencia de la alegría es solamente un área en blanco en tú vista de lo que Dios está haciendo en ti.

¡Mira al amor que Jesús tiene para ti! Jesús nació no sólo para salvarte de la oscuridad del pecado; él nació porque él te ama - ¡él te ama! Aun si nunca hubieras pecado, él hubiera venido al mundo para que él te pudiera amar en tu nivel, de humano a humano.